domingo, 6 de febrero de 2011

La hija del parisano by Louis de Bernières

(...)Esa parte de mí que me pide que haga locuras se irá muriendo tan despacio que casi no me voy a dar cuenta, hasta que un día me miraré al espejo y veré a mi madre, y entonces este tiempo contigo me parecerá un hermoso sueño que tuvo otra persona. (...) Hay cosas que descubrir, la cuestión es, ¿vale la pena conocerlas? (...) empecé también a sentir miedo del paso del tiempo, porque cuando una amistad es tan íntima y tan bonita, siempre cabe la posibilidad de que no dure para siempre (...)